¡Está vivo!

Por fin, qué ganas tenía de escribir un post como este. Desde que inicié la vida de este blog solo he podido poner post destacando el triste juego del Madrid, que si echan a Luxemburgo y cosas así. Pero por fin el domingo por la noche vi un partido en el que el Madrid jugó al nivel que se espera de él.
Si bien en los partidos anteriores (la eliminatoria copera contra el Athletic de Bilbao y el empate a 0 en casa del Villarreal) ya vímos signos de recuperación, estos parecen haberse confirmado en el partido contra el Sevilla (4-2), con un Madrid vibrante, eléctrico, rápido y con clase. Que gustazo ver al Zidane de las mejores tardes, marcando un hat-trick y deleitándo con un repertorio de toques y pases magistral, y qué bien acompañado por Guti (maravilloso su pase de tacón y de espaldas en el tercer gol). En general todo el equipo estuvo muy bien, a pesar de contar con numerosas bajas (Ronaldo, Raúl, Helguera, Salgado). Robinho que poco a poco parece entonarse, y un Cicinho que promete mucho y que está demostrando tener hueco en el equipo. Todos bien salvo Baptista, que continúa desaparecido presa de la tensión y los nervios, no le terminan de salir al hombre las cosas. La victoria se aprecia mucho más teniendo en cuenta que el Sevilla no fue precisamente a pasearse, estuvo también a un gran nivel y nunca dió el partido por perdido.
Ahora lo importante es que esto no sea flor de un día, sino el inicio de una segunda parte de temporada en la que el buen juego sea la norma. Que los jugadores que el domingo se salieron no vuelvan a la oscuridad y mediocridad de los últimos meses. La Liga está casi imposible (13 son los puntos que separan al Madrid del Barcelona), pero aparte de hacer una segunda vuelta de Liga lo más digna posible y quedar en la mejor posición que se pueda, quedan otros objetivos muy suculentos, como la Copa del Rey o la Champions. La respuesta en los próximos partidos.