Mundobasket 06: Lo nunca visto.

Todavía me tiemblan las piernas. Empate a 74. Apenas quedan unos segundos para que termine el partido y Calderón tiene dos tiros libres. Falla el primero. Gestos de tensión y desespero. Mete el segundo, ganamos de uno pero Argentina tiene la última posesión. Yo digo que estaría bien hacer falta para tener la última bola, pero la selección opta por defender la jugada. Argentina mueve y el balón le llega a Nocioni en una esquina, que se juega el triple. El balón vuela por el aire y todo un país contiene la respiración. No entra. Golpea en el aro y sale rebotado. Miles de manos españolas y argentinas luchan por ese rebote definitivo. Nadie parece cojerlo hasta que Rudy Fernández lo consigue atrapar y echa a correr hacia la otra canasta como alma que lleva el diablo. Pero no va a llegar porque el partido ha terminado. El partido ha terminado y España ha ganado. Jugará la final. Los jugadores se tiran al suelo, emocionados, gritando, liberando la tensión. En casa damos saltos de alegría. Gasol, que se ha lesionado en el pie cuando quedaban dos minutos, llora en el banquillo arropado por sus compañeros. Es un puto milagro.

Por primera vez en su historia, España disputará una final de un Mundial. Lo hace derrotando en semifinales a una Argentina rocosa y experimentada que no lo pone nada fácil. Tras un desastroso primer cuarto en el que España sale muy mal, los nuestros se vienen arriba en el segundo y consiguen igualar el partido. Durante toda la segunda parte España manda en el marcador con pequeñas ventajas nunca superiores a 7 puntos, pero Argentina aguanta el tipo gracias a su saber hacer y a su tiro de tres que les mantiene a flote. Tanto que se llega a un final de infarto muy igualado en el que todo se juega a cara o cruz, y esta vez sale cara. España jugará la final ante Grecia, que en el partido anterior ha dado la campanada derrotando a Estados Unidos, la gran favorita.

Sin embargo, como esto es España y aquí la felicidad nunca pueda ser completa, la victoria ante Argentina se cobra un precio alto, la lesión de Pau Gasol que le impedirá jugar la final. Tiene una fractura en el quinto metatarsiano de su pie izquierdo (sea eso lo que sea). Asi que habrá que jugarse el oro sin el concurso de nuestro mejor jugador, aunque el resto de jugadores han demostrado tener clase más que suficiente para enfrentarse con garantías a la peligrosa selección griega. Hoy soñaremos en oro.