Listen Without Prejudice Vol. II

Un universo personal e instranferible de intereses, aficiones y desvaríos capturado en este espacio. Cómics, cine, televisión, literatura, deportes, música... entra y escucha sin prejuicios.

domingo, 18 de marzo de 2007

El regreso de los antisueños.

Esta mañana, las fuerzas anti-sueño que residen en mi edificio han vuelto a actuar, tras un periodo de inactividad en el que con seguridad estaban ideando nuevos y retorcidos planes para alterar el sueño de los vecinos. Sin previo aviso, esta mañana a las 11 en punto se han iniciado las hostilidades. La vecina Vieja y Sorda ha supuesto la primera oleada de ataque mediante la misa de La 2 a todo volumen, con su coro y sus sermones. Hay que resaltar la crueldad inherente a este método, fruto sin duda de una mente pervertida.

Ante este ataque inesperado y demoledor, no ha quedado más remedio que replegar posiciones y retroceder a una nueva posición más segura, alejada de las malignas ondas onírico-disruptivas (la habitación de mis padres). Sin embargo el enemigo estaba preparado para esta eventualidad y, con una coordinación propia de largas horas de planificación y entrenamiento, ha reaccionado con la segunda fase de su ataque. Esta labor ha caído sobre el vecino Músico-Hippie, estratégicamente situado justo bajo la ventana de nuestra nueva posición, con música a elevado nivel de decibelios. Ante la imposibilidad de replegarnos a una nueva posición con un mínimo de condiciones, no ha quedado más remedio que atrincherarnos y resistir de forma numantina el bombardeo musical de diferentes estilos y volúmenes, resignados a nuestra suerte.

Pues eso, que me cago en mis putos vecinos y sus misas y sus músicas. Desde ya planeo mi justa venganza.

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jueves, 8 de marzo de 2007

Trapos sucios.

La nueva moda de los blogs que campean por sus anchas de forma vil e indiscriminada por internet son los Memes, una especie de cadena que alguien se inventa y va pasando a varios de sus blogs “amigos”, que contestan y pasan a su vez a otros blogs que eligen y así de forma infinita (o no). El caso es que este Meme en el que tan gentilmente me ha incluido mí apreciado hermano (te recuerdo que vives bajo mi mismo techo y puedo tomar represalias mientras duermes… ) consiste en sacar a la luz seis de tus trapos sucios, aquellas manías o actuaciones raras de las que no te sientes muy orgulloso. No sabía si hacerlo porque cualquiera que me conozca un poco sabe que soy perfecto, pero he decidido humanizar mi figura con seis cosillas, para que no se diga que no entro al trapo cuando el envite merece la pena. Allá vamos:

1- No puedo dormir con la ventana abierta. Ni siquiera en verano. Cuando llega la temporada estival y el calor derrite las neuronas, lo más que llego es a dejar abiertos los agujerillos de la persiana y me pongo el ventilador. De niño y también de adulto las historias sobre murciélagos que entran en las casas por las ventanas y se posan sobre las almohadas me producen una intensa sensación de inquietud y repugnancia.

2- Soy incapaz de matar bichos. Me da mucho asco, especialmente en el caso de las cucarachas. Si veo alguna por la casa tengo que llamar a alguien para que la mate, si estoy solo lo paso fatal y soy capaz de irme a otra habitación. Tampoco puedo ver cómo las matan, me imagino ese pequeño y asqueroso cuerpecillo negro-rojizo reventando y chorreando líquidos viscosos que… buug,.

3- Me gustan Britney Spears y los Backstreet Boys. Sé que son productos para fans, y que especialmente la Spears no tiene ni idea de cantar y su voz es horrible, pero tú ponme “Opps… I Did It Again” y la tararearé por lo bajito.

4- Me emociono cada vez que veo el final de La lista de Schindler, no importa las veces que la haya visto. Me pasa lo mismo con un capítulo de Ally McBeal, el 16 de la tercera temporada en el que muere Billy, es verlo y emocionarme (después de reconocer esto tendré que abandonar el país, pero bueno).

5- Para dormir tengo que tapar el reloj digital que tengo sobre el escritorio. Ocasionalmente tengo problemas para dormir y antes cuando me desvelaba y veía la hora que era me ponía más nervioso, de ver lo tarde que era. Desde entonces tapo el reloj para no tener la tentación de mirar la hora si tengo alguna noche de insomnio. Lo tapo generalmente con un diskete viejo que llega justo para tapar los números.

6- Un día que llevaba más alcohol en la sangre de lo moral y legalmente permitido (hace muchos años de esto) no se me ocurrió otra cosa que torear un coche que pasaba por la Calle Mayor con mi chaqueta. Ahora lo pienso y está claro que fue una tontería porque podría haberme pillado, y me imagino además el flipe del conductor. Además esa misma noche (y si no fue esa noche si que fue por aquella época) me oriné en la persiana de la peña barcelonista de Alcantarilla, jeje…

En fin, la verdad es que me he puesto y así a lo tonto podría poner más, pero creo que ya he cumplido mi cuota mensual de auto-humillación… y como soy así de generoso, yo no voy a liar a nadie para que lo conteste también. Ale.

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